En el fútbol sino lo quitas el balón a tu rival no tienes como hacerle daño, es por esto que el DT debe estudiar a su rival y saber de qué manera neutralizarlo. Una de las formas es con el pressing.

El objetivo del pressing es obligar al rival a cometer un error para así recuperar el balón y atacar. Para lograrlo los jugadores deben estar en un muy buen estado físico, ya que se requiere de mucho desgaste.

El Pressing: es el arma defensiva para agobiar o someter a presión al equipo adversario en posesión de la pelota, con la finalidad de que cometa un error. Exige a los jugadores un magnífico estado atlético, determinación (agresividad controlada) en los duelos, así como disciplina táctica. Es, asimismo, un arma psicológica que otorga confianza al equipo y siembra la incertidumbre en el adversario.

Para que el pressing sea exitoso se necesita tener claro varios aspectos:

1)      Todo el equipo debe estar en la zona defensiva, en superioridad numérica, en el lugar en el cual se intenta ejercer el pressing.

2)      Mantener el equipo compacto, corto, en superioridad numérica, en la zona de la pelota.

3)      Orientar al rival  hacia una zona favorable al pressing (ejemplos hacia las bandas).

4)      Una vez ejercido el pressing (poniendo bajo presión al portador del balón), intentar recuperar el balón.

5)      Limitar al rival para que no logre realizar un pase hacia atrás al líbero o al portero, el cual permitiría al rival tener salida limpia de la zona de presión.

Existen 3 tipos de pressing:

A) Pressing en el centro del campo de juego en la zona A.

B) Pressing en el ataque en la zona B

C) Pressing defensivo en la zona C.

El pressing es la base del contraataque

JUAN MIGUEL MACÍAS LLADÓ www.dtpollo.com @DTPollo