Un entrenador de fútbol ya sea a nivel competitivo o fútbol base tiene una serie de funciones, según el club en el que desarrolle sus funciones, que pueden ser más o menos amplias y sobre todo unas responsabilidades a tener en cuenta cuando se desarrolla esta labor. Hemos querido enumerar algunas de ellas a nivel genérico con el fin de ayudar a aquellos entrenadores que comienzan esta fascinante labor educativa, formativa, deportiva y de desarrollo personal.
Responsabilidades y funciones del entrenador de fútbol:
- Construcción del equipo de fútbol ya sea individualmente o con sus colaboradores.
- Buscar talentos para su equipo y club.
- Confección y dirección de los entrenamientos. Establecer duración de las sesiones, organización de los entrenamientos, objetivos específicos y generales.
- Dirección de los partidos: antes, después y durante el partido. Controlar todos los aspectos que giren en torno a los mismos.
- Dirección del equipo como un todo y de los jugadores como una unidad.
- Establecer objetivos y metas del equipo.
- Establecer criterios y estructura de los entrenamientos: charla inicial, desarrollo, etc.
- Establecer normas de convivencia o de régimen interno junto con la directiva y capitanes del equipo.
- Motivación de los jugadores de su equipo: Darle a la vez alegría y seriedad.
- Dominar el espacio del lugar del entrenamiento: imagen, control , etc.
- Trasmitir sus ideas con claridad. Saber comunicar.
- No humillar al jugador, solo corregir con firmeza. No recriminar.
- No despistarse en el entrenamiento. Realizar entrenamientos a máxima intensidad física y mental.
- Cuidar material e instalaciones e inculcárselo a sus jugadores.
- Realizar controles del rendimiento y estado anímico del equipo: test, reuniones, etc.
- Evaluar el rendimiento de entrenamientos y partidos.
- Controlar la asistencia de sus jugadores.
- Saber que trabajar en cada momento de la temporada. Formarse para ir adquiriendo conocimientos.
- Establecer un patrón de juego: Como voy a defender, como voy a atacar, estrategias a balón parado, etc.
- Mantener la concentración de tu equipo de fútbol.
- Dar importancia a las pequeñas cosas y detalles.
- Tener carácter o trabajarlo.
- Establecer conexión y conocer todo lo relativo a tus jugadores.
- Crear grupo, hacer “piña”.
- No consentir actitudes que puedan perjudicar al grupo.
Hay muchos más aspectos que se podrían enumerar. Si quieres mejorar esta lista puedes hacerlo realizando un comentario en la entrada o enviando un email a contacto@futbolenpositivo.com