El líder desempeña un papel esencial en la vida de cualquier grupo, es en quien se confía, quien influye y consigue que los miembros trabajen para lograr sus propias metas, quien negocia la mayoría de los aspectos para llegar a consensos.

Los seres humanos somos sociales por naturaleza, nos relacionamos en grupos y normalmente en todos los ámbitos existe una jerarquía, ya sea en la vida familiar, en el trabajo o en cada uno de los grupos de amigos que tengamos. Hay líderes que podemos elegir (por afinidad, empatía y confianza), como es el caso del líder del grupo de amigos, y líderes que nos son impuestos como es el caso de nuestro jefe en el trabajo. La influencia del líder es esencial porque de ello dependen el crecimiento, el desarrollo y la evolución del grupo.

Esto podemos observarlo de forma muy clara en el deporte. La figura que lo representa  es el entrenador (líder formal, elegido por la organización o club) viéndose modulado por el capitán del equipo (líder informal, que surge por la interacción entre los miembros del equipo). Si un equipo de fútbol ha cambiado de entrenador, su influencia se puede observar claramente en la estrategia de juego realizado.

El entrenador tiene dos grandes funciones, considerándole un  buen líder cuando las lleva a cabo de forma efectiva; estas dos funciones son:

  1. Intentar satisfacer las exigencias de la organización
  2. Que el propio grupo lleven a cabo sus necesidades y aspiraciones

Pero hay diferentes clases de liderazgo y cada uno consigue distintos resultados y emociones en el equipo. Según Lewin existen tres tipos de líder:

Líder autoritario: es el único del grupo que toma las decisiones y no necesita justificarlas, los criterios para tomarlas no tienen por qué ser conocidas por el resto del grupo, además permanece alejado de la participación activa en el grupo salvo cuando hace demostraciones, es decir, es aquel que llega, ordena y se va.

  • Este tipo de líder consigue una alta producción en su presencia pero muy baja en su ausencia, la probabilidad de ganar partidos (en el caso de fútbol) disminuye ya que crea un malestar generalizado basado en la apatía y agresividad en todos los miembros de su equipo.

Líder democrático: es aquel que toma las decisiones tras ofrecer varias alternativas y discutirlas con el grupo, recibiendo opiniones de sus seguidores, los criterios para tomar las decisiones son explícitas y claras.

  • Este tipo de líder consigue una alta producción tanto en su ausencia como en su presencia, por lo que la probabilidad de ganar partidos (volviendo al caso del fútbol) aumenta porque existe una mayor satisfacción y rendimiento, además de elevar la unión entre los miembros del grupo.

 Líder “dejar hacer”: es aquel que adopta un papel pasivo, abandona el poder en manos del grupo y se limita a aportar las medidas necesarias, ni juzga ni evalúa las aportaciones de los demás miembros.

  • Este tipo de líder consigue una baja producción tanto en su ausencia como en su presencia, por lo que la probabilidad de ganar partidos (seguimos con el ejemplo del fútbol) disminuyen considerablemente ya que en ningún momento se consigue una alta producción. Raramente encontraremos este tipo de líderes en equipos de fútbol de renombre.

Como podemos ver en esta sencilla explicación, el líder que consigue mejores resultados a todos los efectos es el líder democrático, que consulta y discute las decisiones que se tomaran posteriormente ya que la sensación que transmite es que cada uno de los miembros del grupo es importante y puede aportar algo para la obtención de resultados más favorables

Para finalizar, decir que los líderes influyen de forma directa e irremediable en los resultados de un grupo y dependiendo de las cualidades que tengamos y la forma de ejercer el liderazgo alcanzaremos unos resultados u otros.

Esto hace plantearse varias preguntas como: ¿qué tipo de líder eres? ¿Se relaciona con los resultados de los partidos? ¿Tomas en cuenta las opiniones de tus jugadores? .

MJ Zambrano
Granada
Licenciada en Psicología